Granos en los brazos: qué hacer y cómo tratarlos.

Si alguna vez has notado pequeños granitos en la piel de tus brazos, es posible que estés lidiando con una afección común conocida como queratosis pilaris. Esta condición, también llamada "piel de gallina", ocurre cuando la queratina, una proteína que protege la piel, crea un tapón bloqueando los folículos pilosos.

 Aunque la queratosis pilaris es inofensiva, puede resultar molesta y afectar la apariencia de la piel y la autoestima de la persona. En este blog, exploraremos qué hacer y cómo tratar estos granos en los brazos para mantener la piel suave y saludable.

¿Qué es la queratosis pilaris?

Como ya hemos visto, la queratosis pilaris es una afección cutánea frecuente que se manifiesta como pequeños granos o protuberancias en la piel que dan la sensación al tacto de papel de lija. Comúnmente aparecen en los laterales de los brazos y en los muslos, y en bebés más en el rostro. Afecta sobre todo a personas jóvenes. Se cree que más del 60% de los jóvenes y del 40% de los adultos sufren esta patología.

Estos granos aparecen debido a la acumulación de queratina en los folículos pilosos. Esta obstrucción da lugar a una textura áspera y un aspecto característico similar a la "piel de gallina". Aunque es una condición inofensiva y no dolorosa, puede resultar molesta y afectar a la apariencia de la piel. Además, en algunos casos puede llegar a provocar un picor bastante intenso.

Causas de la queratosis pilaris

No se conoce la causa exacta de esta afección cutánea, pero lo que si sabemos es que suele estar muy relacionada con otras condiciones de la piel como es la piel seca o la dermatitis atópica.

Por otro lado, la genética también juega un papel importante en su desarrollo, ya que es común que afecte a varios miembros de una misma familia. Los cambios hormonales también pueden influir, siendo más frecuente en la adolescencia y en mujeres embarazadas.

Tratamientos para la queratosis pilaris

El objetivo principal del tratamiento de esta afección es conseguir reblandecer este tapón de queratina, para tener la piel más lisa y con una mejor textura. Además, es importante, si el caso es más severo y va asociado de mucho picor, acudir a un dermatólogo para que evalúe bien al paciente y pueda pautarle un tratamiento más específico.

1. Hidratación constante

Aplicar a diario cremas emolientes es clave para mantener una piel suave y evitar la sequedad cutánea. La crema hidratante de avena ayuda a hidratar en profundidad y calmar y reparar todo tipo de pieles, incluso las más sensibles. Por otro lado, activos como la urea o el ácido láctico pueden ayudar a exfoliar suavemente la piel y conseguir mejorar su textura. Lo ideal es hidratarse al menos dos veces al día y que una de ellas sea justo después de la ducha cuando la piel esta todavía ligeramente húmeda, para conseguir una mayor absorción.

2. Exfoliación

Es recomendable utilizar exfoliantes una o dos veces en semana para ayudar a eliminar todas las células muertas y conseguir una mejor textura de la piel. Eso sí, cuidado con utilizarlos en exceso ya que pueden resultar irritantes para pieles más delicadas.

3. Tratamientos tópicos específicos

En caso de que con estas medidas no sea suficiente, existe la posibilidad de acudir al dermatólogo para que nos paute algún tratamiento más específico, como pueden ser los tratamientos con retinoides.

Consejos adicionales

Otros consejos que pueden ayudar a llevar un mejor control de la queratosis pilaris son:

• Duchas adecuadas: Es preferible que las duchas sean cortas y con agua tibia para prevenir una mayor irritación de la piel. También recomendamos el uso de geles syndets o los llamados “jabón sin jabón” para mantener la piel en buen estado. El gel de ducha de lavanda de Green Cornerss, además, posee activos hidratantes y calmantes y un pH fisiológico, que lo hace una opción ideal para estos pacientes.
• No utilizar esponjas. Es recomendable el uso de toallas suaves de algodón y secar la piel sin frotar.
• No manipular las lesiones: Evitar rascar o presionar las protuberancias para prevenir irritaciones y posibles infecciones.
• Evitar cambios muy bruscos de
• Evitar depilarse con cuchilla o cera: Estas técnicas pueden irritar aún más la piel, por lo que es mejor optar por métodos alternativos de depilación.

Cuando consultar a un dermatólogo

Aunque la queratosis pilaris es generalmente inofensiva y puede manejarse con los cuidados que hemos mencionado, hay situaciones en las que es recomendable consultar a un dermatólogo. Si el uso de cremas emolientes no mejora la apariencia de la piel o si los granos causan picazón intensa, irritación o inflamación, es importante buscar ayuda profesional. Además, si tienes dudas sobre el diagnóstico o si la condición afecta tu autoestima y calidad de vida, un dermatólogo puede ofrecer opciones de tratamiento más avanzadas y personalizadas.

En algunos casos, la queratosis pilaris puede confundirse con otras afecciones cutáneas que requieren diferentes abordajes, por lo que una evaluación médica asegurará que recibas el tratamiento adecuado.

Cuidar de la salud de tu piel es fundamental para sentirte bien contigo mismo, y con las medidas y el consejo experto, puedes mantenerla suave y saludable.