Descamación de la piel: ¿Cómo debo tratarla?

La piel es el órgano más grande del cuerpo y constituye una barrera fundamental para protegernos del medio externo. Sin embargo, su estructura se puede ver alterada por diversos factores que nos pueden llevar a situaciones de descamación de la piel. 

En este blog te contamos más sobre la descamación de la piel y cómo podemos tratarla.

¿Por qué se me descama la piel?

La piel está constituida por una serie de capas de células que conforman una estructura perfectamente organizada. Estas células van pasando desde las capas más profundas, donde son más redonditas, hasta la superficie o capa basal donde pierden su forma y pasan a ser más planas y ya están muertas. 

Este proceso natural de la piel tarda un mes aproximadamente y se denomina queratinización. En su parte final, cuando las células muertas de la capa córnea se pierden de la superficie, se llama descamación, por lo que podemos decir que la descamación es un proceso natural de la piel. 

El problema está cuando, por diversos factores, se produce un desequilibrio en este proceso natural, produciendo una descamación excesiva de la piel visible.

Los factores más comunes que nos llevan a descamación son: 

• La edad.
• El clima.
• Exposición solar excesiva.
• Irritantes externos, como detergentes muy agresivos.
• Presencia de alguna enfermedad poco frecuente del sistema inmunitario o genéticas.
• La presencia de alguna de las siguientes afecciones cutáneas: eczema, psoriasis, dermatitis seborreica, queratosis actínica, ictiosis vulgar y cáncer, entre otras.

Esta piel escamosa está muy asociada a una piel seca, en la cual hay una pérdida del factor natural de hidratación presente en la piel, que provoca una reducción en la capacidad de la piel de retener el agua y mantenerse sana. 

La piel descamada suele ir acompañada de picazón, erupciones y otros problemas de irritación de la piel.

Cómo tratar la descamación de la piel

Ya que la descamación puede surgir como consecuencia de algunas enfermedades de la piel, lo primero que deberíamos hacer es tratar la patología.

Sin embargo, es posible mantener tu piel saludable y evitar la descamación siguiendo las siguientes recomendaciones:

• Ducharte con agua no excesivamente caliente, mejor que sea tibia, durante no más de 15 minutos y con un jabón suave respetuoso con tu piel como es nuestro Gel de ducha de lavanda.
• Después de la ducha, sécate con una toalla suave a toquecitos, sin frotar, y aplica una crema hidratante que ayude a retener la humedad en la piel.
• También es importante hidratarse por dentro mediante la ingesta de suficiente agua.
• Si el clima es muy seco, es recomendable el uso de humidificadores en casa.
• Tener cuidado y extremar las precauciones con el sol y el frío.
• Utiliza ropa adecuada de algodón y lávala con detergentes suaves para no irritar tu piel.

Mejor crema para la piel descamada

La mejor crema para combatir la descamación cutánea es aquella hidratante que contenga ingredientes altamente humectantes, como es el caso de nuestra Crema hidratante de Avena, con Aloe vera, extracto de avena y de caléndula, entre otros activos, que va a conseguir mantener la piel hidratada y calmar y reducir la inflamación de estas pieles tan sensibles.

Si tras el uso de cremas hidratantes no mejora visiblemente la piel descamada, es mejor entonces acudir a un dermatólogo para que diagnostique la causa exacta de esta descamación y le recomiende un tratamiento más específico, además de descartar otras posibles afecciones.